lunes, 29 de enero de 2018

Como seria una Venezuela en el Capitalismo?


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 Muchos hemos visto los resultados de un modelo económico socialista y comunista, pues en la actualidad de nuestro país van casi 20 años de un gobierno con esa inclinación y los resultados están a la vista, y no son muy buenos (por no decir catastróficos).  Pero que pasaría si todos estos años en vez de eso hubiésemos tenido un modelo capitalista, que hubiese pasado si se hubiese incentivado la producción de la empresa privada o que pasaría si en Venezuela se aplicara hoy en día? Aquí te lo contamos y te mostramos algunos ejemplos.
  

   Al momento de analizar las experiencias de las economías de corte e ideología marxista en países como la extinta Unión Soviética, Cuba y Nicaragua, vemos un denominador común, su fracaso en ofrecer una economía pujante, generadora de empleos, bienestar y de mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos. Países como China Comunista, se deslastraron hace ya más de 20 años de esa orientación económica centralizada, estatista y de controles económicos de todo tipo.


El ejemplo de China

   Hoy la concepción económica de China, se parece cada día más a las economías de concepción capitalista de los países de Occidente; y este hecho ha producido, que China se ha convertido en una potencia económica y financiera de "Primer Mundo". Se estima que en unos 25 años, de continuar el ritmo acelerado y sostenido de su crecimiento económico del 10 y 11% interanual de los últimos 15 años, China pueda convertirse en la primera potencia económica a nivel mundial, con la reducción sustancial de la pobreza de sus ciudadanos.

  Uno de los problemas que enfrenta China hoy, es que su crecimiento acelerado está poniendo presión sobre el gobierno chino para aminorar su explosivo crecimiento y no producirse un recalentamiento sobre su economía que presione sobre los precios y su moneda, el yuan. La Bolsa de Shangai, se ha convertido en una de las Bolsas de Valores de mayor rentabilidad a nivel mundial en los últimos años, y sus rendimientos han registrado impresionantes crecimientos de hasta 92% de retorno en un año. El empuje en los precios de las acciones chinas es el resultado de un factor determinante: "ganancias..., ganancias y más ganancias". El mercado de capitales y de valores de China y de sus países vecinos se ha convertido en centro de atracción de los capitales mundiales.

   Cada día China y los países asiáticos abren sus mercados a la inversión foránea, estableciendo reglas claras y seguridad jurídica para esas inversiones. Esto contrasta con el caso venezolano, donde cada día las garantías, marco legal y constitucional para los inversionistas nacionales o extranjeros se deterioran y debilita. El planteamiento socialista que se propone en la actualidad se aleja de las corrientes modernas y de desarrollo de los países que han alcanzado éxito económico, o en vías de alcanzarlo. Venezuela tiene todos los elementos para ser un país exitoso. 

     Venezuela cuenta con los recursos naturales para hacer de este país, un gran país. Cuantiosos recursos que están aquí para desarrollar y crear riquezas para los venezolanos. No obstante, los recursos naturales por sí solos no son suficientes, se requieren de políticas económicas que fomenten la inversión y el desarrollo. Es irreal pensar, que los inversionistas extranjeros vendrán a realizar sus inversiones bajo la sola premisa de los grandes recursos con que contamos, si a esa inversión no se le da seguridad jurídica necesaria y reglas de juego claras y de continuidad en el tiempo. Estabilidad, confianza y equilibrios macroeconómicos son elementos clave.

   Actualmente las economías del mundo están sentadas sobre la base de la libre empresa, el libre mercado, la apertura comercial y la competitividad internacional. Países y regiones se integran para activar y mejorar sus flujos de comercio e inversión, así como para desarrollar sus ventajas comparativas y competitivas, la interdependencia y globalidad son la dinámica misma del proceso. 

  En consecuencia, lo presentado y dicho hasta ahora sobre un eventual modelo socialista–marxista de la economía venezolana, no encaja y es contrario a las tendencias del mundo moderno de hoy; y en nuestro caso, lo que traería es retraso, más pobreza y la pérdida de las grandes oportunidades que tiene el país de desarrollarse y mejorar la calidad de vida de la mayoría de los ciudadanos. China se dio cuenta de este gran error y emprendió un cambio hacia la modernidad, la apertura y el desarrollo. Abriendo sus mercados y áreas de negocios (construcción, finanzas, seguros, etc.).

   Que en nuestro caso, no tengamos que pasar por la mala experiencia que sufrió la Unión Soviética o China, para darnos cuenta de lo que se necesita es más capitalismo para todos, incentivar la propiedad privada como valor fundamental, el trabajo productivo, incentivar y dar apoyo financiero y técnico a todos los venezolanos que quieran emprender para hacerlos empresarios prósperos y generadores de empleos. Un país donde la iniciativa privada a emprender, crear, poseer y disponer la tenga el ciudadano y no el Estado. Eso sacaría el país adelante.

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